Ganadería
Huichapan
En el mismo sitio donde ahora se encuentra asentada, en el municipio de Tecozautla, Hgo., muy cerca de Huichapan, de donde toma su nombre, los hermanos Lugo Verduzco oriundos de esta población fundaron esta casa ganadera en la finca propiedad de su señor padre. Inició con 98 vacas y 3 sementales de la ganadería de don Jesús Cabrera. Para 1980 adicionó 2 sementales de la misma procedencia y posteriormente 3 sementales de San Martín, 1 de Javier Garfias y 1 de San Miguel de Mimiahuápam, lo que le ha permitido conservar la pureza y evitar la consanguinidad en la línea San Mateo. Lidió por primera vez una corrida de toros el 21 de septiembre de 1980 en Tijuana, Baja California Norte, con una corrida de 8 toros que estoquearon Manolo Martínez, Antonio Lomelín que cortó dos orejas, Rogelio Leduc que tuvo gran tarde al llevarse cuatro orejas y un rabo, y Miguel Espinosa Armillita Chico. El 20 de Noviembre de ese mismo año en la Plaza Revolución de Irapuato, Manolo le cortó el rabo a "Hortelano" y Antonio Lomelín hizo lo propio con "Tapabocas" e indultó al extraordinario "Comino" de pelo colorado. En 1981 se presentó en la Monumental Plaza de Toros México el 26 de julio con una novillada para Juan Carlos Contreras, Rafael Carmona y Antonio Urrutia. Al año siguiente Antonio Lomelín le cortó las dos orejas y rabo en Querétaro a "Faraón" el 5 febrero. El 24 de octubre de 1982 Valente Arellano cortó su primera oreja en la Plaza México al novillo "Fandanguero". En 1988 obtuvo su cartel en la corrida del 24 de abril en que Jorge Gutiérrez le cortó las dos orejas a "Monarca" y una más a "Texcocano" y Javier Bernaldo le realizó una media verónica inolvidable a "Compadre", para 1995 Mariano Ramos logró una gran faena a "Romancero", al que le cortó las dos orejas. En la temporada 1996-1997 de la Plaza México se le concedió el premio al mejor toro a "Azafrán" que lidió Rafael Ortega; el 21 de septiembre de 1997 en tarde de gran triunfo en la Plaza México Julián López El Juli le cortó las dos orejas a "Camborio" y Jerónimo se llevó dos más de "Magnífico". Con una gran afición y una rigurosa selección don Adolfo lleva las riendas de esta casa ganadera con la que ha cosechado muchos triunfos en todas las plazas. Ha sabido conservar la línea de Cabrera sosteniendo como bandera la bravura y ha logrado una mezcla con la nobleza que aunados con el respeto escrupuloso de la edad en toros y novillos que establece el reglamento y la costumbre, le permite a los toreros tener triunfos muy importantes.