En Salitrillo de Chinampas, municipio de Ojuelos, Jalisco, don Manuel Cortina Rivas fundó esta casa ganadera en 1944, con 50 vacas y 2 sementales de Corlomé. En 1945 agregó un semental de La Punta. Se presentó en la Monumental Plaza de Toros México el 25 de agosto de 1946: ocho novillos para Manuel Jiménez Chicuelín, José Luis Vázquez, Fidel Rosalem Rosalito y José Rodríguez Joselillo. En 1954 añadió a su simiente 100 vacas de Matancillas. Don Manuel fallece el 12 de abril de 1962 y hereda la ganadería su viuda, doña Teresa Pizarro, quien la vendió a don Francisco Madrazo Solórzano y éste, a su vez, en 1963 la puso a nombre de su esposa, doña Esperanza de la Torre de Madrazo, y se trasladó el ganado a la ex hacienda de La Punta, donde agregó 4 sementales y 100 vacas de esa procedencia. Don Rodolfo Camarena Franco, descendiente de criadores de bravo compró en 1991 el nombre, el hierro y la divisa de la ganadería, mismos que aún conserva, por ser un hombre respetuoso de las tradiciones; además adquirió un lote de 15 vacas y un semental de La Punta y lo trasladó a donde ahora se encuentra la dehesa. Inició esta nueva etapa de Chinampas con 100 vacas de Torrecilla y Aurelio Franco, puestas con 3 sementales de Torrecilla y 2 de Cerro Viejo. En 1993 agregó 15 vacas de La Punta y en 1994, 4 sementales más, 2 de San Mateo y 2 de San Marcos. En 1996 adquiere un semental de Montecristo, un toro que toreó Alfredo Lomelí en Guadalajara y fue indultado. En 1997 agregó un semental de San Mateo y 3 de San Martín y en 1998, un lote de 10 vacas de Paco Torre, procedencia de Garfias y 4 sementales de De Santiago. Su primer encierro con el actual ganadero al frente de la dehesa lo presenta en Tecolotlán, Jal., una corrida a beneficio de la Cruz Roja en la que alternaron Alfredo Lomelí y Arturo Díaz El Coyo, que se llevaron entre los dos cinco orejas y un rabo en un debut muy afortunado para el criador.