.:: Toros de Lidia ::.
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Ganaderías:

Aquí encontrará Información de las ganaderías por orden alfabético.

Ganadería

Marco Garfias

Propietario:

Don Roberto Garfias Canovas

Rancho:

El Palmar

Ubicación:

Villa de Arriaga, San Luis Potosí

Denominación:

No tiene

Divisa:

Naranja, rojo y negro

Fundación:

1976


Don Marco Antonio Garfias de los Santos fundó su casa ganadera en el año de 1976 con 70 vacas y 2 sementales de De Santiago. Para 1979 agregó 60 vacas y 3 sementales de Garfias. Se presentó en la Ciudad de México en la Plaza Monumental el 28 de octubre de 1984 con seis novillos para Eulalio López El Zotoluco, Mauro Vázquez y José Roberto Garza que le cortó las dos orejas a su primero de nombre "Alarife" y una más al que cerró plaza "Alquimista". Ese mismo año cedió la ganadería a favor de su señora esposa actual propietaria. Su primera corrida de toros en el Distrito Federal el sábado 5 de diciembre de 1987 en el Palacio de los Deportes con seis toros para Francisco Curro Rivera, Manolo Arruza y Miguel Báez Litri quien cortó una oreja. Envió su primer corrida de toros a la Monumental de Insurgentes el 28 de febrero de 1991 con seis toros para el diestro hispano Antonio José Galán, Gerardo Montejano y Héctor de Granada. El 12 de noviembre de 1994 en El Toreo de Cuatro Caminos, Enrique Garza se llevó dos orejas y Pepín Liria una más. El 17 de diciembre de 1995 El Zotoluco se llevó las dos orejas de un toro de regalo de nombre "Califa". El 1º de enero de 1996 en Torreón, Coahuila, Jorge Gutiérrez se llevó una oreja por cada uno de sus dos enemigos y Arturo Gilio cortó tres orejas. El 5 de enero de 1997 Pedrito de Portugal le cortó las dos orejas a cada uno de los dos toros que le tocaron en suerte. El 1º de mayo de 1999, en Torreón, Coahuila, Alejandro Silveti y Arturo Gilio cortaron una oreja cada uno y Federico Pizarro cortó tres orejas. Lidia con mucha frecuencia en todas las plazas de la República. Con gran entrega y afición sostienen muy en alto esta casa pues con vehemencia y ahínco defienden lo suyo hasta el final, con gran entereza han enfrentado los terribles problemas agrarios que los han afectado con daños incuantificables.